El embarazo adolescente

 

El mantener relaciones sexuales durante la adolescencia es una opción que cada persona toma en función de consideraciones de diversa índole. En cualquier caso, cuando se decide mantenerlas, hay que tener en cuenta que siempre existe la posibilidad de embarazo. Aunque físicamente los adolescentes pueden ser padres, no significa que emocionalmente estén preparados para ello, ni que estén capacitados para afrontar la crianza de un niño, considerando lo que esto puede suponer, desde el punto de vista personal y social.También reciben el nombre de embarazos no deseados, pues las consecuencias que estos pueden tener en la pareja son importantes. Siempre  que se decida mantenerlas, ha de ser con la protección adecuada, no solamente para evitar el embarazo sino también para prevenir enfermedades de transmisión sexual como lo pueden ser el sida o la hepatitis.

 

 Causas:

Las tasas de embarazo en la adolescencia y el índice de natalidad para la adolescencia ha disminuido desde que alcanzó su punto más alto en 1990, debido al incremento en el uso de los métodos anticonceptivos. Es sin duda un asunto bastante complejo con muchas razones para preocuparse. Los adolescentes más jóvenes (12 a 14 años) tienen mayor probabilidad de tener relaciones sexuales no planeadas y de ser forzados al sexo. Los principales factores de riesgo son:

  • Edad más joven
  • Rendimiento académico deficiente
  • Desventaja económica
  • Mala relación o situación familiar
  • Necesidad de probar su fecundidad
  • Mantener relaciones sexuales a edades muy tempranas
  • Antecedentes familiares

Síntomas:

Son prácticamente idénticos a los que puede tener una mujer cuyo embarazo era deseado. Los más comunes son:

  • Aumento de tamaño de las mamas y sensibilidad mamaria (dolor en los pechos)
  • Distensión abdominal (aumento de tamaño en el área ventral)
  • Fatiga
  • Mareos y desmayos
  • Ausencia del periodo
  • Náuseas y vómitos
  • Irritabilidad

La adolescente puede o no aceptar que ha mantenido relaciones sexuales, pero tarde o temprano se sabe dado que los cambios que se experimentan en el cuerpo de una mujer cuando está embarazada no pasan desapercibidos. Para confirmar el embarazo, se suele recurrir a un test que se puede comprar en cualquier farmacia y luego hacerse un análisis completo para mayor seguridad.

¿Qué son y cómo funcionan los test de embarazo?

Se trata de test urinarios que evidencian la presencia de la hormona hCG(hormona gonadotropina coriónica humana) en la orina ,la cual no está presente en aquellas mujeres no embarazadas. Cuando el óvulo fecundado se implanta en la pared del útero se comporta como un tejido extraño al organismo de la madre, ya que el 50% de la información genética que contienen sus células proviene del padre. Para evitar un posible rechazo, las células comienzan a producir la hormona hCG, que frena el sistema inmunológico materno, y además, detiene el ciclo menstrual.

El test (presentado en forma de varilla ) contiene una serie de anticuerpos que reaccionan en presencia de la hormona del embarazo. Una línea azul o una pequeña cruz aparecen en función del estado en el que se encuentre la mujer (embarazada o no embarazada),estos signos difieren según el tipo de marca.

Tratamiento:

Deben considerarase todas las opciones posibles (aborto, adopción o criar al hijo con ayuda de la familia). Es aconsejable acudir a un médico para que le explique a la pareja de adolescentes, de manera imparcial, todos los caminos que pueden seguir, con las consecuencias que estos pueden tener. En caso de que al final los chicos decidan ser padres, su forma de vida tendrá que cambiar especialmente en el caso de la madre. Tiene que abandonar cualquier mal hábito que haya adquirido ( consumo de drogas, tabaco, alcohol), alimentarse correctamente, realizar ejercicio físico y dormir todo lo que necesite.

 El aborto: riesgo de muerte o solución:

En un embarazo no deseado en la adolescencia, es común que se piense en la posibilidad de un aborto, las razones pueden ser variadas y va desde la inmadurez de la madre para criar a un hijo hasta la presión de los padres por "el qué dirán".En la mayoría de los casos, el padre-adolescente se desentiende totalmente de su responsabilidad, lo que motiva a la joven a tomar esta drástica decisión. Además, una niña no puede enfrentarse sola a una situación como esa dado que las  secuelas que le dejaría un aborto son muy grandes. Por ejemplo, tendría mayor dificultades para quedarse embarazada si lo desea en un futuro, le costaría más mantener relaciones sexuales, su autoestima también se vería dañado y podría incluso caer en una depresión y sentirse culpable por lo que ha hecho.

Complicaciones y problemas:

 

Tener hijos a una edad tan temprana, implica una serie de riesgos tanto para la madre como para el bebé. Aquellos niños cuyas madres son adolescentes, son más propensos a tener problemas de desarrollo o de  crecimiento.De hecho, tienen una probabilidad de 2 a 6 veces más de tener bajo peso al nacer. La tasa de mortalidad y de abortos espontáneos también es mayor. Las adolescentes embarazadas pueden sufrir complicaciones médicas graves como:

  • Placenta previa
  • Hipertensión inducida por el embarazo
  • Parto prematuro
  • Anemia grave
  • Toxemia